22 de junio de 2007

BESTIAS

Vi como se quitaba la ropa
su manos trémulas
la deslizaban despacio por su cuerpo
mientras yo me iba deshaciendo
en el tiempo.

No quise tocarla
no quería dañarla con mis garras
pero esta carne mía fue tan débil.

Era tan exquisitamente delgada
era el aborto de la belleza
yo sólo su objeto.

Loca manía mía de bloquear mi risa
de mantener mi inexpresión
la calumnia fue nuestra aliada
los dos nos engañamos,
diciéndonos que era posible esa unión
haciendo todo por convencernos de ella
por abstenernos de pensar en...

Pero la verdad llegó
los instintos despertaron
ella devoró mi brazo
yo seguí con sus piernas
después ella se fue sobre las mías
y yo ya no tuve fuerza
para saber lo que pasó después.

1994.

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